Pasar un día en Torremolinos
Si por esas casualidades del destino debes quedarte un solo día en Torremolinos, te recomendamos que lo vivas al máximo; y si tienes la suerte de que ese único día coincide con una festividad, pues entonces podrás conocer mucho más de su cultura y su gente.
Disfrutar de un desayuno en la playa puede ser una excelente forma de empezar un día en Torremolinos; las opciones son variadas y el mar presenta una invitación al relax y a la desconexión total de la cotidianidad.
Después, vale una escapada por el centro de la ciudad, donde las calles principales, el paseo y las tiendas te harán alucinar con la cantidad de propuestas, para todos los gustos y todos los bolsillos.
La calle San Miguel es una de las de mayor movida de la ciudad; día y noche está animada y repleta de gente que va y viene, toma café, va de tapas, mira las tiendas, la recorre de uno a otro lado; además, está cerca de la estación del tren, lo que facilita la llegada.
La Plaza Costa del Sol, recientemente renovada, tiene una atractiva pérgola que la hace agradable para caminar bajo su sombra, así como el parque de esculturas, donde se realizan conciertos, exposiciones y mercadillos al aire libre.
Por
ubicarse cerca, el Jardín Botánico Molido del Inca y el Parque de Los
cocodrilos también resultan buenas opciones a la hora de conocer en modo
relámpago los lugares más emblemáticos de Torremolinos.
El Jardín
Botánico es un área de 4 hectáreas listo para recorrer, apreciar la variedad de
plantas y la naturaleza en todo su esplendor. Es un plan si quieres ver algo
más que playas y arena.
En el
Parque de Los cocodrilos podrás ver de cerca cómo conviven los más de 300
ejemplares de cocodrilos, incluyendo al más grande de Europa, con un peso de
casi 600 kilos.
Otro plan imperdible, especialmente si estás con la familia, es visitar el Acuario Sea Life, donde las especies marinas son el espectacular atractivo, tiburones, cangrejos, rayas, estrellas de mar y una variedad impresionante de fauna marina en un solo lugar.
El atardecer será inolvidable con un recorrido por el Paseo Marítimo donde aguardan 6 kilómetros de camino, bien sea en bici o patinando; aunque una caminata también resultaría relajante, con el mar y la cantidad de tiendas y chiringuitos para disfrutar de la gastronomía local e internacional.
Además, podrás disfrutar de las vistas que se aprecian desde los miradores de Torremolinos, para que completes la experiencia teniendo unas panorámicas impresionantes.
Terminar la jornada a la orilla de una de las playas de Torremolinos es la forma de cerrar el día con broche de oro, saboreando un buen vino o una cerveza y disfrutando del famoso pescaíto frito que tanto gusta.
Visitar Torremolinos en un día será el abreboca para un plan más extenso de disfrute de uno de los mejores sitios de la Costa del Sol.