Desembarco Virgen del Carmen
Cada 16 de julio se celebra en el barrio de La Carihuela de Torremolinos el Día de la Virgen del Carmen, una festividad que comenzó en el siglo XVIII cuando la mayoría de los habitantes eran pescadores, de ahí esta tradición del desembarco de la virgen del Carmen.
La celebración incluye una serie de actos religiosos donde participa la Hermandad de Marineros (los hermanos, como se les denomina a los devotos y participantes de esta festividad), integrada por niños y adultos que visten de traje de marinero y cargan y bailan el trono de la imagen de la Virgen del Carmen.
También incluye la presentación de bandas musicales y la oferta gastronómica propia de Málaga, con suculentos platos que son el disfrute de los pobladores y turistas.
La Virgen del Carmen es la patrona de los marineros, de allí el fervor de este barrio de Torremolinos que cada vez suma más devotos y seguidores a organizar y participar en las actividades como el desembarco marinero.
La celebración comienza un día antes, con una ofrenda floral en la iglesia Nuestra Señora del Carmen, y el 16 se realiza una misa marinera a las 11 de la mañana con la participación del coro rociero La Carihuela.
A las 7 de la tarde empieza la procesión desde la iglesia por las calles del barrio de La Carihuela, hasta la playa Rincón del Sol.
Allí también se celebra una misa marinera con cantos y salves, y bailando el trono de la Virgen, luego llega el momento cumbre cuando montan la imagen de la Virgen en una embarcación llamada chalana o media jábega, y la pasean por todo el litoral de Torremolinos.
Tras pasearla en procesión por el litoral de Torremolinos en dirección a Benalmádena se produce el desembarco de la Virgen del Carmen para llevarla de nueva a su iglesia.
A pesar de que La Carihuela ha dejado de ser un barrio de pescadores para convertirse en un lugar turístico de referencia, su patrimonio arquitectónico y cultural lo enaltece con celebraciones como la festividad en honor a la Virgen del Carmen.
Cada año se suman más asistentes a la misa y a la procesión, llegando a sumar hasta 25 mil personas, quienes participan de los cantos y bailes.
Actualmente son pocas las familias que viven de la actividad pesquera, pero la tradición se mantiene gracias a la devoción por la patrona de los marineros, celebración que se ha convertido en los últimos años en otro atractivo turístico de Torremolinos.